Este año se ha propagandizado a este país, tal como en el periodo de la conquista; la estructura pública, política del estado chileno, instituciones y empresas privadas nacional y del extranjero que poseen sus propios medios de comunicación, han levantado su campaña para homenajear un bicentenario bajo presión y en la prisión de sus ciudadanos miembros de un pueblo preexistente, los poderes jerárquicos uniformistas y homogenizantes en su testarudez pretenden borrar la verdadera imagen de un país diverso, con historias subyugadas, terrorismo sistemático institucionalizado en nombre de la democracia, hoy son ellos que tienen el ostentoso placer de festejar genocidios, explotaciones, saqueos, discriminación, racismos, exclusiones y engaños.
Las naciones preexistentes como es el caso de nuestro pueblo mapunche, tiene el deber moral de referirse al daño presente gozando de pequeñas libertades propias en un país mutilado de visiones progresistas, los pueblos han cimentado caminos de acuerdos proyectando perspectivas hacia el futuro, mientras que el estado republicano nacional chileno continúa dando ejecución a la depredación de los bienes de todos, desmedrando al planeta y a todos los seres vivos por mucho dinero.
Los políticos embaucadores soflaman como el pan de cada día combatir la pobreza, mientras los pobres creyentes de fuertes dogmas ideológicas impuestas, son materiales de desechos solo para votar y escoger un servil al neoliberalismo, así mismo, hoy el pueblo desinformado solo llevado por el circo comunicacional esperan unos días de entretenimiento y bullicio, para luego volver a las esperanzas inciertas.
La nación mapuche hereda hasta el presente un conjunto enorme de derechos fundamentales coadministrado íntegramente en el equilibrio del Azmapu desde la preexistencia: Territorio, Cultura, Idioma, Historia, Economía, Gobierno, Filosofía e Identidad, pero desde hacen 200 años en el periodo de instalación del estado republicano quiso demostrar su poder empleando todas las formas de subordinación y terror, no respetó tratado alguno suscrito con España, y consigo mismo, nuestro pueblo fue fronterizado por los estados chileno-argentino, sometidos a la estructura administrativa asimilacionista, arrebatando los territorios hasta nuestros días e invadidos por empresas española, italiana, estadounidense, noruega, con represas, geotermias, salmoneras, forestales, celulosas, mineras por todo el territorio nacional, pero los últimos gobiernos han montado este circo orquestado y engañoso de una imaginaria independencia. Pero los pueblos indígenas somos parte integrante y complementaria del planeta, interactuamos desde las fuerzas imperecederas de nuestras savias de vida integra, a pesar del intento de exterminio, estamos y seguiremos mas vigente por siempre.
Llamamos al gobierno central, intendencias y municipales del estado chileno a no convocar actos de celebraciones triunfalistas y de ultraje, ya que sería un suceso grosero para nuestra nación, recordemos que en el último tiempo han sido asesinados varios de nuestros hermanos mapuche por manos de policías del estado chileno, no ha habido muerte alguna de policías por manos de mapuche; han sido recluidos muchos hermanos mapuche en cárceles de alta seguridad del estado chileno y ningún usurpador de nuestros derechos milenarios; muchos perseguidos, sentenciados y desaparecidos por la justicia del estado chileno; hemos sido desalojados de nuestros territorios ancestrales amparados por la administración y la justicia del estado chileno ¿Aún así nos llaman terroristas?
¡Chile no es una nación única, estamos las naciones preexistentes!, señores gobiernos, no nos han consultado para definir si queremos celebrar en conjunto su bicentenario y de que manera, ¿vuestra dignidad permitirá generar actos de arrepentimiento?, después de extensas campañas y a pocos días de rememorar solo 200 años en nuestro Wallmapu existen actitudes totalitarias, beligerantes y de privación en contra de la libre expresión consagrado como un derecho humano, de la libre determinación de las naciones primitivas, de las libertades fundamentales, de nuestros derechos históricos fundamentales, y con 34 prisioneros políticos mapuche en riesgo vital.
La historia debe ser juzgada con urgencia y reencontrada en un país plurinacional.
Chile no debe ser como hasta ahora un estado de Norteamérica.
Parlamento de Koz koz.
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