A juicio del parlamentario, no existe ningún ente de carácter técnico-científico en el país que pueda asegurar -a ciencia cierta- que el proyecto de Barrick no va a producir daño al ecosistema. Añade que los permisos otorgados por el Gobierno abren un riesgo latente de contaminación para toda la zona del Valle del Huasco.
SANTIAGO, octubre 02.- Junto con Hidroaysén, Pascua Lama es otro de los proyectos que está en la mira de los medioambientalista nacionales y sus críticas se han difundido incluso fuera de Chile.Sin embargo, el Gobierno ya aprobó el último permiso que estaba pendiente para iniciar las obras y la empresa Barrick comenzará la explotación de oro a rajo abierto en la Región de Atacama, a 4000 metros de altura en la frontera de Chile con Argentina.
Por ello, el senador integrante de la Comisión de Minería de la Cámara Alta, Ricardo Núñez, hizo una nueva advertencia sobre los daños irreparables que provocará la eliminación de cianuro con que se procesa el metal precioso, y que terminarán dañando las aguas, la agricultura y hasta a la población de la zona.
Así lo cuenta en entrevista con Terra.cl.
¿Qué daños puede generar Pascua Lama?
Es un proyecto que puede provocar un daño irreparable al ecosistema del Valle del Huasco. Yo sé que se han hecho muchos estudios y entiendo que los organismos y entidades dedicadas a temas medioambientales han hecho un esfuerzo suficiente para asegurar que las medidas que se han exigido a Barrick sean adoptadas.
Sin embargo, no hay ningún ente de carácter técnico-científico en nuestro país que pueda asegurar a ciencia cierta que no se va a producir un daño. Tampoco se han hecho los esfuerzos para traer entidades extranjeras, que en Chile no existen, para que señalen efectivamente si se va a producir un daño o no.
¿La planta va a desechar materiales peligrosos?
La planta va a requerir cianuro para procesar el oro y además los relaves van a estar en el lado chileno.
Pero además ya se han intervenido glaciares, por lo cual no hay garantía que con todas las medidas adoptadas por los organismos medioambientales se puedan prever los daños que provoque la exploración del oro a esa altura de la cordillera.
¿También está en riesgo la contaminación del agua y el consiguiente daño a la población?
Por cierto, no hay nadie que nos pueda asegurar ahora que no vaya a producirse una filtración a las napas, que exactamente nacen en la alta cordillera y que son las que terminan por alimentar gran parte del curso de los ríos que alimentan al río Huasco.
No hay nadie que asegure que eso no va a ocurrir en la medida en que no existen medios tecnológicos científicos para poder medir los efectos del cianuro a alta altura.
Además, los monitoreos no dan la seguridad total y plena de que este elemento químico, altamente contaminante y muy dañino para la agricultura y el ser humano, no se vaya a filtrar por las napas subterráneas que corren en el subsuelo.
Pero entonces ¿por qué el Gobierno aprobó el último permiso que estaba pendiente para iniciar las obras?
Las autoridades tienen que cumplir la ley y muchas de ellas no están suficientemente informadas de los aspectos más esenciales de lo que significa la explotación del oro.
¿Y qué reacción ha tenido la población de la zona?
Hay falta de unidad de parte de los habitantes de Vallenar, como de Alto del Carmen y de toda las ruralidades que están en el valle y que viven del río.
También ha habido una manipulación bastante grosera de la conciencia colectiva de los habitantes del valle, y de ahí que en estos momentos la mayor parte de las resistencias han venido de las personas de afuera del valle que de la población de ahí propiamente tal.
Y desde la perspectiva económica ¿qué beneficios le traer a la zona Pascua Lama?
Solamente empleo... solamente empleo. Y no necesariamente va a beneficiar a los habitantes del Valle del Huasco, pues la mayor parte de esos empleos -una vez más- van a beneficiar a muchos otros chilenos que no son necesariamente habitantes de Vallenar, de Alto del Carmen, etc.
¿Hay atractivos turísticos que serán afectados también?
Allí los principales atractivos turísticos son el Río Huasco y el embalse de Santa Juana, por cierto hay otros atractivos que no han sido explotados aún y que se ubican justamente en la alta cordillera.
Todos dependen de la actividad agrícola y fundamentalmente de aguas no contaminadas río arriba.
Gisela López Alfaro
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